GAZA/TEL AVIV/EL CAIRO.- Pese a la violencia registrada entre israelíes y palestinos ayer, los esfuerzos por lograr una tregua en el conflicto que comenzó hace ocho días, tuvieron éxito. El canciller de Egipto, Mohamed Kamel Amr, y su par norteamericana, Hillary Clinton, anunciaron un alto el fuego luego de ocho días de enfrentamientos, pero el cumplimiento de los acuerdos genera expectativa (ver "Exigencias").

Toda gestión parecía destinada al fracaso por el atentado explosivo contra un ómnibus en Tel Aviv, que dejó una veintena de heridos (tres de ellos, en grave estado), tras una oleada de un centenar de bombardeos de Israel a la Franja de Gaza. El ataque en la calle Shaul Hamelej, calificado de terrorista por el Gobierno israelí, fue el primero contra un colectivo desde 2006. Una columna de humo emergía de las ventanillas hechas trizas y de las puertas dañadas. El revestimiento plástico se bamboleaba desde el techo, y es era un milagro que todos los pasajeros hayan salido con vida de su interior.

Cerca del lugar se encuentran el Ministerio de Defensa y el Instituto Goethe alemán. "Habíamos contemplado que, además de la amenaza de cohetes, podía haber atentados en las grandes ciudades. Existe la motivación y la capacidad de hacerlo", sostuvo el jefe policial Yohanan Danino. Según medios israelíes, hay dos personas detenidas, pero no se informó nada oficialmente.

El movimiento islámico armado palestino Hamas calificó la acción como una "reacción natural" frente a la ofensiva militar israelí en Gaza, que ayer fue particularmente agresiva. "Felicitamos a nuestro pueblo por ese acto heroico. Bendecimos el ataque", se afirmó por los altavoces de las mezquitas en la franja, donde se escucharon disparos al aire como celebración. Sin embargo, ningún grupo se adjudicó la explosión. "Las facciones palestinas van a recurrir a todas las vías para proteger a nuestros civiles, a falta de una iniciativa internacional para poner fin a la agresión israelí", dijo el vocero islamista, Sami Abu Zuhriel, sobre la operación Pilar de Defensa.

De inmediato hubo reacciones en el mundo por lo ocurrido. "Los ataques contra civiles israelíes inocentes son indignantes. Estados Unidos se mantendrá junto a su aliado israelí y proveerá toda la asistencia que sea necesaria para identificar y llevar ante la justicia a quienes perpetraron este atentado", afirmó la Casa Blanca en un comunicado. La canciller alemana, Ángela Merkel, ante el Parlamento, aseveró que la nueva ola de violencia "comenzó con disparos de Hamas a territorio israelí".

Clinton estaba por llegar a El Cairo al momento de este hecho, para gestionar la tregua (su labor fue fundamental), tras haberse entrevistado con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el presidente palestino, Mahmud Abbas, en Cisjordania (no gobierna en Gaza), donde hubo incidentes. En Egipto, sede de las negociaciones que impulsaba el presidente Mohammed Mursi, también está el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, quien también repudió el atentado: "ninguna circunstancia justifica el ataque a civiles".

El papa Benedicto XVI pidió ayer a israelíes y palestinos que adopten medidas "valientes" para alcanzar la paz y respaldó las gestiones con ese fin. "La región está atormentada por demasiados choques y necesita la reconciliación", agregó (ver Opinión).

Blancos estratégicos

Los blancos israelíes de ayer fueron el Ministerio de Seguridad Interna de Hamas y un edificio donde trabajan medios de comunicación internacionales como las agencias de noticias France Presse y Associated Press, y la cadena qatarí Al Yazeera. Además, fueron objetivos "50 puntos de lanzamiento de cohetes, tres almacenes de armas, una fábrica de armas y un sistema de túneles utilizado para transportar combustible y para actividades terroristas", informó el Ejército.

Hasta ahora, hay 147 palestinos muertos , y hay más de 1.100 heridos, muchos de ellos civiles. En Israel murieron cinco personas y hay un centenar de heridos. Los medicamentos se están agotando en los hospitales de Gaza y los precios de los alimentos alcanzan precios siderales. (Télam-Reuters-DPA-AFP)

Los principales actores internacionales

ESTADOS UNIDOS: está abiertamente a favor de Israel, con un apoyo que no demostró desde hacía tiempo. No objetó la posible invasión a Gaza y habló del derecho de autodefensa.

ONU: El secretario general, Ban Ki-moon, consideró la crisis como asunto central e interviene personalmente. En la asamblea se debe votar el pedido de Palestina de ser Estado observador.

EGIPTO: tiene el papel más importante, como mediador entre Israel y Hamas. El presidente Mursi llegó al poder por los Hermanos Musulmanes. La población es mayormente antiisraelí.

TURQUÍA: es el otro actor regional de peso. El premier Erdogan se solidarizó con el pueblo palestino, lo que le impide ser gestor de la paz pero le granjea positivas miradas en el mundo árabe.

QATAR: envía una gran ayuda humanitaria y económica a la franja, a la que ahora sumó gestiones por la paz. Pretende reducir el margen de influencia y de acción de Irán, aliado de Hamas.

LIGA ÁRABE: demostró ser poco efectiva, pero intenta actuar en el conflicto y envió a Gaza una comitiva liderada por el Líbano, país limítrofe y en constante tensión con Israel.